Las cifras de China siempre han sido escandalosamente altas, siempre creciendo cada año por encima del doble dígito (10%) y con cifras absolutas realmente mareantes. Pero parece que la tendencia se tuerce, y el IPC chino de enero sólo ha crecido un pobre 1%. Se trata de la novena caída consecutiva del índice en nueve meses y del nivel más bajo en 30 meses. Y precipitará, previsiblemente, un nuevo recorte de los tipos de interés por parte del banco central, que ya ha revisado a la baja los tipos cinco veces desde septiembre. Son malos tiempos para China, que sufre la crisis igual que el resto de países, aunque con menores problemas.

La crisis ya forma parte de nuestro vocabulario. Cualquier reflexión cotidiana la contiene y la culpa de todo lo tiene la Crisis. Creo que no es cierto y que la crisis es más un problema mental que real, así que os recomiendo este blog,  C.R.I.S.I.S. (Comunidad Reducida de Individuos Saturados de Información Social) donde se critica el «estado inducido» en el que nos han colocado intereses privados y da soluciones al respecto o como mínimo un punto de vista diferente, extrovertido y crítico : http://krississ.blogspot.com/

El presidente chino acaba de llegar a España para visitar a nuestro primer ministro, José Luis Rodríguez Zapatero. El objetivo es impulsar las relaciones empresariales mediante la firma de 12 acuerdos que beneficiarán a compañías españolas en productos y servicios que China no puede satisfacer con su producción interior.

Todos estos acuerdos son a gran escala y los participantes son grandes empresas españolas que firman acuerdos con el Gobierno Chino en materia de transporte, generación de electricidad, salud, e incluso armamento. Son grandes importaciones a gran escala.

Tras estos acuerdos, China sigue siendo el primer proveedor extracomunitario de España, es decir que la mayoría de las importaciones que entran en España vienen de China, aunque no suene nuevo, pero al mismo tiempo, nuestro quinto mercado fuera de la UE. Desgraciadamente, al hacer el cambio y mirarlo desde la óptica china, España es el decimosexto mercado para China y el vigésimo noveno suministrador.

En cualquier caso, la posición de España frente a China teniendo en cuenta el volumen y población de ambos países no es del todo malo, estamos por delante de otros países con un tamaño similar al nuestro, aunque lo que sería la balanza comercial entre ambos países queda claramente decantada hacia China, algo que también pasa con la totalidad de países del mundo, incluido Estados Unidos, que compra a China más de lo que le exporta.