Luckyarn: importar de China con seguridad
Al importar de China, últimamente los clientes son más atrevidos y ya por su parte han iniciado los trámites iniciales de la importación, habiendo contactado con el proveedor chino, abonado el pago inicial e iniciado la producción. En Luckyarn no aconsejamos este procedimiento, ya que la mayoría de los errores, en muchos casos irreparables que acontecen en la importación de China de todo tipo de productos, se producen en las fases iniciales de diseño y aceptación del producto.
La mayoría de los proveedores chinos responden a los e-mails con traductores on-line de dudosa precisión y muchas veces confirman haber entendido nuestras instrucciones cuando no lo han hecho y estos errores desembocan en errores terribles.
En la fotografía de la derecha podéis ver un ejemplo garrafal. Esta marca europea de prendas textiles solicita realizar una etiqueta para su marca y bajo la fecha, 1956, el proveedor borda la frase «Never established 1956» (Nunca establecida en 1956). Más abajo a la izquierda, podemos ver otra traducción de una etiqueta en la que se traduce entre otras barbaridades «cool iron» (o planchado frío) como «hierro chulo».
Finalmente, como ejemplo también ilustrador, podemos ver la etiqueta que encontré en la ducha de un hotel en la que se traducía el tradicional «Precaución, suelo mojado» erróneamente por «Silp Carefully» (Sin errores tipográficos debería ser «Slip carefully» que traducido es «Resbala con cuidado»).
Estos son sólo ejemplos ilustrativos de la importancia de que un equipo de expertos en importaciones de China como Luckyarn o cualquier otra empresa especizalizada lleve el proceso de importación desde los primeros contactos, ya que en ese momento se generan la mayoría de los errores e incongruencias de la producción.
Cabe añadir a los errores anteriores de traducción al inglés su desconocimiento de nuestro idioma, y su tendencia a eliminar nuestros acentos y diéresis de sus traducciones, ya que para ellos son elementos nuevos que carecen de importancia. Ya hemos visto más arriba un ejemplo de mala traducción en una etiqueta de composición.
A los problemas lingüísticos hay que añadir los problemas culturales, donde nuestro gusto varía enormemente del suyo. Valga también como ejemplo la anécdota explicada en esta otra entrada anterior sobre la decisión personal del proveedor chino de cambiar el color del forro de un neceser porque para él era «más moderno».
De ahí que es muy importante que un equipo de personal nativo consulte cualquier error o duda del proveedor con Europa para subsanar estos errores antes de que las etiquetas y demás elementos constitutivos de la prenda estén ya realizados y sea imposible arreglar el desastre, o bien que el color se haya malinterpretado, o que un bordado no se encuentre en la posición requerida.
Por eso te recomiendo que te ahorres todos estos dolores de cabeza y utilices nuestras tarifas exepcionales y confíes en nosotros. Incluso, si tienes proveedor y toda la parte de producción atada, confía en nosotros y te haremos sólo la parte de control de calidad e importación de la mercancía, aunque de nuevo no sea nuestra recomendación. En estos casos, recomendamos que solicites al proveedor cotización FOB, ya que es práctica habitual en China ofrecer cotizaciones CIF que son falsas, es decir, que sólo cubren una parte mínima (ej, un 5%) del coste real del flete, por lo que al llegar la mercancía al puerto de destino deberás abonar el 95% restante en otros conceptos.