¿A quién importar? La búsqueda de proveedores de China
Para poder realizar una importación de China o más ampliamente, para poder realizar una transacción comercial en general, se necesita un proveedor y un cliente. Asumiendo que tenemos el cliente, la transacción depende en su mayor parte del proveedor y de su capacidad para entregarnos un producto de calidad, precio y condiciones de pago y entrega aceptables. Es extremadamente delicada la selección de proveedores y en mi experiencia me ha dado más de un susto al tener el pedido ya cerrado pero encontrarme con problemas con el proveedor y tener que buscar una segunda opción. Muchos clientes han decidido aventurarse por su cuenta comprando en tiendas chinas por internet que posteriormente han resultado ser una estafa o incluso proveedores de dudosa calidad que finalmente no cumplen y han terminado recurriendo a nosotros para solucionar la importación.
Para evitar sorpresas que ya tuvimos en el pasado, Luckyarn envía las solicitudes de nuestros clientes a nuestras cuatro oficinas en China (Shenzhen, Shanghai, Ningbo y Xiamen) que a su vez se encargan de contactar a un mínimo de 10 proveedores para ese producto y enviarnos dos de sus mejores cotizaciones. Nosotros, en la oficina de Barcelona, seleccionamos de esa oferta una o dos según creamos la más conveniente, y no siempre el precio es el que hace la diferencia, ya que hay que tener en cuenta otros detalles como el expediente o ficha del proveedor entregado por la oficina, la forma de pago, la rapidez para realizar el pedido o plazos de entrega, o la calidad que presente frente a la demandada por el cliente.
Otro punto a tener en cuenta son las cantidades y el tipo de proveedor que se busca. En Internet puedes encontrar empresas que ofrecen cantidades pequeñas, entonces son mayoristas como los que existen en el mercado de Yiwu, el más grande del mundo, y cuanto mayores son los mínimos que imponen al pedido mayor es la envergadura del proveedor, por tanto mayor confianza puede depositarse en él y mejores precios se obtendrán ya que estamos yendo a la fuente del producto, sin intermediarios. Por supuesto traer cantidades pequeñas hace que los gastos fijos de cualquier flete o despacho marítimo sean mayores (en referencia a las unidades) que si las cantidades son mayores. En otras palabras, un despacho de aduanas tiene un valor fijo de 100€ para el despachante, que si se divide en 100 unidades supone 1€ por unidad, pero si se divide entre 1.000 unidades supone sólo 10 céntimos.
Nuestro consejo en este capítulo sería elije tu proveedor con sumo cuidado y revisa todas las cláusulas. Solicita más de una cotización y no sólo mires el precio. Te ahorrarás muchos dolores de cabeza.